Situado en el término municipal de Vilches, Jaén, es un yacimiento arqueológico de gran relevancia que abarca diversas etapas históricas. 

Este enclave, conocido como la "pequeña Pompeya íbera", se extiende sobre una meseta en la confluencia de los ríos Guadalimar y Guadalén, ofreciendo una posición estratégica que ha sido aprovechada por diferentes civilizaciones a lo largo de los siglos.

Entre los vestigios más destacados se encuentran los restos de un oppidum íbero, considerado uno de los más emblemáticos de la provincia de Jaén. Además, el sitio alberga un santuario prehistórico, un cenobio paleocristiano o visigodo y un castillo almohade del siglo XII, construido tras la batalla de las Navas de Tolosa. Esta diversidad patrimonial convierte a Giribaile en un paraíso para los amantes de la arqueología y la historia.

El acceso al yacimiento se realiza desde la carretera comarcal A-312, que conecta Linares y Arquillos. Tras pasar la desviación de Guadalén, un camino a la derecha conduce, tras aproximadamente cuatro kilómetros, al pie de este asentamiento histórico. La visita a Giribaile permite apreciar la huella de diferentes culturas en un entorno natural de especial belleza, rodeado de olivares y sierras, ofreciendo una experiencia única que combina paisaje, cultura y patrimonio.